La dieta mediterránea enriquecida con AOVE, una aliada frente a los accidentes cardiovasculares
La evidencia científica sobre los beneficios de la dieta mediterránea para la salud cardiovascular se refuerza con los resultados del estudio CordioPrev. Este estudio, presentado en el 30º Congreso Nacional de Medicina General y de Familia (SEMG), demuestra que seguir una dieta mediterránea enriquecida con solo tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra (AOVE) al día puede reducir significativamente el riesgo de reinfartos y muerte en pacientes que ya han sufrido un infarto previo.
Un patrón de consumo ancestral con beneficios probados
La dieta mediterránea, rica en frutas, verduras, legumbres, frutos secos, pescado y aceite de oliva virgen extra, ha sido ampliamente estudiada por sus efectos positivos en la salud. Diversos estudios han demostrado que este patrón de consumo tradicional reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares, algunos tipos de cáncer y diabetes tipo 2.
El AOVE, protagonista de la dieta mediterránea
El aceite de oliva virgen extra (AOVE) es un elemento fundamental de la dieta mediterránea y uno de los principales responsables de sus beneficios para la salud cardiovascular. El AOVE es rico en ácidos grasos monoinsaturados, antioxidantes y compuestos antiinflamatorios que protegen el corazón y los vasos sanguíneos.
CordioPrev: evidencia científica de peso
El estudio CordioPrev, publicado en la revista científica The Lancet, asignó a 1.002 pacientes que habían sufrido un infarto previo a seguir una dieta mediterránea enriquecida con AOVE o una dieta baja en grasas durante siete años. Los resultados del estudio mostraron que los pacientes que siguieron la dieta mediterránea con AOVE reinfartaron o murieron un 27% menos, en comparación con aquellos que consumieron la dieta baja en grasas.
Los resultados del estudio CordioPrev sugieren que la dieta mediterránea enriquecida con AOVE podría ser tan eficaz o incluso más que los medicamentos para prevenir la muerte y el reinfarto en pacientes con enfermedad cardiovascular previa.
Una llamada a la acción: promover hábitos saludables
A pesar de los beneficios probados de la dieta mediterránea, su consumo en España se encuentra en un 30-40% de la población, principalmente entre los mayores de 50 años. Los expertos reunidos en el Congreso SEMG instan a promover este patrón de consumo saludable, especialmente entre los niños y jóvenes, quienes son más propensos a consumir una dieta rica en grasas saturadas y productos ultraprocesados.
La educación en las escuelas, la concienciación de los padres y las campañas de información dirigidas a los jóvenes son algunas de las medidas propuestas para fomentar la adopción de la dieta mediterránea entre las nuevas generaciones.
En definitiva, la dieta mediterránea enriquecida con AOVE se presenta como una herramienta poderosa para prevenir las enfermedades cardiovasculares y mejorar la salud en general. Promover este patrón de consumo tradicional es una inversión en el presente y futuro de la salud de nuestra sociedad.